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Tecnología e información al servicio de la sociedad

27 de Junio de 2018//
(Tiempo estimado: 4 - 7 minutos)

La tecnología está muy presente en el Grupo CLH. Para acercar los productos petrolíferos a las zonas de consumo, la compañía, presidida por José Luis López de Silanes, utiliza modernos equipos y los más avanzados desarrollos informáticos.

Entre otros avances, CLH opera vía satélite sus más de 4.000 kilómetros de oleoductos desde un moderno Centro de Control, situado en Torrejón de Ardoz, activo las 24 horas del día, todos los días del año.

Conscientes de su importancia estratégica, el centro ha estrenado recientemente una nueva versión de SCADA, el potente programa informático que utilizan los especialistas de la sala de control para gestionar, supervisar y recibir información de toda la red de oleoductos. Han sido necesarios cinco años de intensos trabajos de desarrollo e ingeniería, que han dado como resultado una aplicación más ágil, flexible y segura.

Uno de los aspectos más relevantes del nuevo SCADA es que es un sistema abierto, compatible con otros programas informáticos, lo que ha permitido integrar dentro de la plataforma aplicaciones y herramientas de gestión que antes estaban dispersas. De este modo, los especialistas pueden realizar un gran número de tareas desde sus propias pantallas, sin necesidad de abrir otros programas, ganando así en agilidad.

Y todo ello reforzando la seguridad, y especialmente la ciberseguridad, una de las materias que más atención ha requerido. Esta nueva versión incorpora sofisticados firewalls de última generación, que se actualizan de forma permanente, lo que dota a este sistema de robustez y protección ante intromisiones externas.

El sistema SCADA envía unos 70.000 datos de la red de CLH que se actualizan cada cinco segundos. Por razones de seguridad y también para realizar estudios o consultas, el sistema graba esta información. La anterior versión guardaba un año de datos y, sobrepasado este tiempo, se almacenaban en una unidad externa. Ahora es posible grabar directamente cinco años de información en tiempo real y acceder a ella on-line, lo que otorga una mayor rapidez en las consultas.

Además, incluye herramientas avanzadas para gestionar de manera más eficiente esta amplia base de datos, permitiendo, por ejemplo, realizar seguimientos sobre el número de maniobras y horas de funcionamiento que soportan los equipos. 

El nuevo SCADA también ofrece mayor versatilidad a la hora de organizar el trabajo. Es posible configurar qué información puede recibir y gestionar cada especialista desde su puesto de la sala de control y limitarla, por ejemplo, a un único tramo del oleoducto o a la supervisión de unas maniobras concretas, lo que permite focalizar mejor las tareas.

En este proyecto de modernización también se han tenido en cuenta otras cuestiones además de las tecnológicas, como la salud. Por eso, la apariencia del nuevo programa, lo que se denomina interfaz, se ha renovado. Los gráficos tienen nuevos colores que han sido pensados para no cansar a la vista y facilitar el trabajo.

La renovación también ha incluido la modernización de los espacios de trabajo. Las consolas de los especialistas son regulables en altura, lo que ofrece la posibilidad de trabajar sentados o incluso de pie en algunos momentos del día, para combatir el sedentarismo.

Instalaciones digitalizadas

Otra seña de identidad del Grupo CLH es el alto grado de automatización de sus procesos, gracias a la progresiva digitalización de sus sistemas, lo que ha hecho posible reducir o eliminar la intervención manual en muchas de sus operaciones.

Este proceso de digitalización se observa especialmente en el funcionamiento de las 40 instalaciones de almacenamiento que la compañía gestiona en España. 

Así, el acceso a las plantas está automatizado gracias a las tarjetas RFID (identificación por radio frecuencia) de los conductores y a los sistemas instalados en los camiones, que también reducen el tiempo invertido en este proceso. Además, garantizan que vehículos y personas cuentan con todos los permisos para acceder. 

Una vez que el camión entra, en la propia zona de carga, el conductor programa las cantidades y el tipo de combustible a cargar en la cisterna. La mezcla de productos y aditivos es automática, con lo que se reduce el tiempo invertido y se garantiza que la proporción es la indicada por cada cliente. 

Finalizado este proceso, los propios conductores obtienen el albarán asociado a la carga y la información fiscal de la misma se transmite en tiempo real a la Agencia Tributaria. Una vez más, el proceso gana en eficiencia, al destinarse menos recursos.

Otro ejemplo de digitalización es el nuevo Centro de Control de Instalaciones, desde el que es posible supervisar y gestionar en remoto las plantas de la compañía, siguiendo el modelo implantado en la red de oleoductos, lo que potencia la seguridad de las operaciones y favorece una respuesta ágil e inmediata cuando sea necesario

Para lograrlo, CLH ha reforzado los sistemas de comunicación y control de 24 instalaciones, mediante la implantación de nuevos dispositivos, equipos y cámaras de seguridad. Esta renovación tecnológica se irá extendiendo progresivamente al resto de centros, con el objetivo de que en 2020 todas las instalaciones puedan ser operadas a distancia.

También la gestión de los activos ha mejorado impulsada por la creciente digitalización de la compañía. Gracias a la implantación de sensores y sistemas de monitorización, la política de mantenimiento ha dejado de estar basada en revisiones o actuaciones con una frecuencia de tiempo fija, para evolucionar hacia un mantenimiento personalizado para cada equipo, ajustado a sus necesidades, uso y funcionamiento dentro de las operaciones logísticas.

Innovamos juntos

Mantener este alto nivel tecnológico es un trabajo continuo y planificado, en el que también colaboran las personas de la compañía, porque una buena idea puede surgir en cualquier área y el trabajo en equipo permite alcanzar mejores resultados.

Partiendo de esta filosofía, el Grupo CLH cuenta con una herramienta informática en la intranet, denominada Aporta, que ayuda a los empleados a enviar sus propuestas de mejora de forma sencilla y directa, dándoles la oportunidad de participar en la política de I+D+i del grupo. Desde 2015, la compañía ha recibido más de 350 sugerencias.

Todas las ideas recibidas son estudiadas por un Comité Técnico de Calidad e Innovación y por las áreas implicadas, que determinan si son útiles y si es factible su implantación. En el caso de que la propuesta sea aprobada, los propios impulsores podrán liderar su puesta en marcha.

Además, CLH premia cada año las mejores sugerencias recibidas, a través de un concurso, con el doble objetivo de fomentar la participación y reconocer la proactividad e implicación de las personas en el progreso de la compañía.

Este año, el primer premio del concurso ha recaído en el nuevo sistema que han desarrollado varios profesionales de la instalación de Alcázar de San Juan para tomar muestras de combustibles de los tanques de almacenamiento de forma más segura y en menor tiempo.

El segundo premio ha sido para un proyecto que agiliza la extracción de los rascadores. Estos dispositivos de inspección y limpieza se introducen en el interior de los oleoductos como parte de los trabajos de mantenimiento de la red logística de CLH. La idea galardonada propone incorporar una pértiga plástica modular para alcanzar los rascadores y poder extraerlos sin necesidad de recurrir a otras herramientas que pueden provocar descargas de electricidad estática.

La tercera sugerencia premiada plantea mejorar la gestión de los datos relativos a la profundidad de los oleoductos. El objetivo es que varias aplicaciones informáticas de la compañía tengan acceso a estos datos, de modo que un mayor número de áreas puedan utilizarlos, lo que facilita la toma de decisiones en las autorizaciones de obras y en la planificación de los trabajos de mantenimiento de los oleoductos. 


Texto publicado en Executive Excellence nº149 jun. 2018.