Nombrado recientemente vicepresidente de Relaciones Gubernamentales e Institucionales de SEAT y del Grupo Volkswagen en España, Ramón Paredes (Don Benito, Badajoz, 1956) lleva casi cuatro décadas vinculado a la compañía, en cuya Escuela de Aprendices ingresó en 1971.
Con estudios de Ingeniería Técnica, así como de Dirección General de Empresas por IESE, en 1992 fue nombrado responsable de Prensas de la empresa española. Dos años más tarde, asumió el cargo de director de Prensas de Zona Franca, conocida como “Business Unit Barcelona”, puesto que ocupó hasta 2002, cuando se responsabilizó de los Talleres de Montaje de la fábrica de Martorell. En 2003 accedió a la Vicepresidencia de Recursos Humanos, cargo que ha desempeñado a lo largo de siete años.
En esta nueva etapa, Paredes es responsable de la Vicepresidencia de Relaciones Gubernamentales e Institucionales, un área de nueva creación, que responde al objetivo de potenciar y afianzar las relaciones de la compañía española y del Grupo Volkswagen con las principales administraciones e instituciones públicas y privadas de España, así como reforzar su involucración en la sociedad española.
FEDERICO FERNÁNDEZ DE SANTOS Y ALDARA BARRIENTOS: Durante siete años ha ocupado la Vicepresidencia de Recursos Humanos de SEAT. ¿Cuáles considera que, actualmente, serían las innovaciones necesarias -en materia de RRHH en la industria del motor- para alcanzar los niveles de productividad de Alemania o la República Checa?
RAMÓN PAREDES: Las innovaciones necesarias en materia de Recursos Humanos deben darse, principalmente, en tres aspectos: flexibilidad, salario y formación. Por lo que hace referencia a la primera, es necesario seguir avanzando en mecanismos de flexibilidad que permitan a la empresa optimizar sus recursos, adaptándose a las necesidades de mercado y evitando la generación de stocks e ineficiencias ocasionadas por rigideces internas.
Asimismo, es primordial vincular los salarios a indicadores internos de productividad y resultados de la empresa, y no a indicadores económicos como el IPC. Si la empresa tiene éxito, los empleados han de ser partícipes de él. Esto hace que el empleado se sienta mucho más involucrado en el negocio y permite una situación win-win entre el empleado y la empresa.
Otro aspecto también muy importante es el nivel de formación técnica o específica. Aquí tenemos mucho camino por recorrer, especialmente en el ámbito de la formación profesional, en la que otros países como Alemania llevan años apostando, disponiendo en estos momentos de personal altamente cualificado. En nuestro país, una apuesta clara hacia este tipo de formación nos permitiría contar con capital humano más preparado para afrontar los retos que nos plantea la industria, especialmente la del automóvil.
F.F.S./A.B.: Recursos Humanos es un área especialmente sensible en época de crisis. ¿Cuál ha sido la decisión más difícil que ha tenido que tomar bajo este cargo y cómo la afrontó?
R.P.: Las decisiones de reestructuración en una empresa son siempre difíciles, ya que aunque en ocasiones sean necesarias para el saneamiento económico de la empresa en situaciones de crisis, siguen suponiendo a nivel emocional una gran desmotivación, no sólo para las personas que la sufren en primera persona, sino también para sus compañeros, que en muchos casos acaban soportando mayores cargas de trabajo en un clima laboral difícil.
F.F.S./A.B.: En 1971 ingresó en la Escuela de Aprendices de la empresa y, desde entonces, ha desarrollado una carrera ascendente, recalando en diferentes áreas, tanto en España como en Alemania. ¿Cómo calificaría la evolución de la formación en el Grupo y hacia dónde van las tendencias en esta área?
R.P.: En paralelo a la evolución de los sistemas productivos, logísticos y de gestión, también ha evolucionado el sistema de formación y de desarrollo de las personas.
Ya no sólo enfocamos la formación a aspectos teóricos técnicos o tecnológicos, ni siquiera a desarrollar competencias personales o habilidades de gestión, sino a identificar y desarrollar los aspectos que cada persona puede mejorar. Con ello pretendemos aumentar su rendimiento en el desempeño de su función actual, así como preparar a la persona para que pueda evolucionar hacia nuevas responsabilidades.
Una parte básica y fundamental de los procesos de formación, ya en la actualidad y con más intensidad en un futuro próximo, será la identificación de necesidades formativas en función de las necesidades de la empresa y de las competencias de los trabajadores.
Acorde a estos programas de formación, y a modo de ejemplo, SEAT inició hace algo más de dos años el proceso de definición de los planes de desarrollo personalizados en función de grupos profesionales.
F.F.S./A.B.: Asume ahora la Vicepresidencia de Relaciones Guberna-mentales e Institucionales para SEAT y el Grupo Volkswagen en España, de nueva creación. ¿Cuáles son sus principales objetivos y los mayores retos a los que se enfrenta en un futuro próximo, que promete ser complejo?
R.P.: El principal objetivo que afronto desde mi nueva responsabilidad en el Comité Ejecutivo de la compañía es situar a SEAT en el lugar que le corresponde por su peso específico en la industria y en la economía española. SEAT goza de una serie de singularidades al tratarse de la única empresa automovilística integral española, que hasta ahora no han sido debidamente aprovechadas desde nuestro punto de vista.
En línea con lo anterior, voy a dedicar una parte importante de mis esfuerzos a lograr que SEAT mejore y afiance su presencia en la sociedad civil y en las instituciones públicas.
Debemos despertar de nuevo el orgullo de disponer de una marca automovilística propia, y más aún en una coyuntura económica como la actual.
Por otra parte, aunque SEAT es una marca muy conocida en España, no ocurre lo mismo en muchos de los mercados internacionales en los que está presente, y disponemos de un importante potencial de crecimiento, si somos capaces de darnos a conocer.
La creación de este nuevo cargo responde también a la necesidad de disponer de una posición en la Alta Dirección del Grupo Volkswagen que represente los intereses de nuestro Grupo en España, y es lógico que dicha función se lleve a cabo desde SEAT, por tratarse de la marca del Grupo con un mayor peso específico en este país, tanto a nivel económico como social.
F.F.S./A.B.: El año 2009 fue especialmente complicado para SEAT (con pérdidas de 187 millones de euros); sin embargo, en el primer semestre de 2010 las ventas han aumentado un 40,6%. ¿Cuáles son las perspectivas de crecimiento? ¿Qué plan estratégico subyace tras esta reacción?
R.P.: La reducción de las pérdidas está sustentada principalmente en un aumento de las ventas, un mejor mix de producto, una mejora sustancial en el tipo de cambio y una mejora significativa en los costes de los materiales.
Respecto a las perspectivas de crecimiento, podemos hablar de tres efectos básicos: nuevos lanzamientos de producto, principalmente Ibiza ST y Alhambra; mejora de la evolución de la marca en los mercados, y un nuevo modelo de negocio. Este último aspecto hace referencia a lo que podríamos denominar una “vuelta a los básicos”: disponer de un producto adecuado, precios y oferta comercial entendible para los clientes, red comercial sólida y profesional, mejora del negocio de flotas y, finalmente, una campaña para mejorar la reputación e imagen de SEAT. Ésta se basa en múltiples acciones de marketing que se focalizan en tres pilares de acuerdo a nuestras señas de identidad: fútbol (deportividad), música (gente de espíritu joven y familias) y diseño (estilo).
F.F.S./A.B.: A pesar de los resultados de 2009, la partida de I+D+i ha seguido creciendo año tras año, todas las marcas están presentando grandes innovaciones… ¿Cuál será la dirección que tomará SEAT, en la senda de la innovación dentro del Grupo VW?
R.P.: SEAT seguirá apostando por la I+D+i como lo ha hecho hasta hoy. No en vano, somos el segundo inversor en I+D de España con más de 500 millones de euros invertidos, por detrás de Telefónica, según datos de Eurostat, la Oficina de Estadísticas de la Unión Europea.
Sin duda, el reto con el que se encuentra la industria del automóvil y la sociedad en general es el de la movilidad sostenible en las mega-ciudades del futuro. Este proceso precisará de grandes cambios no sólo en la cadena de valor de la industria del automóvil, sino también en la adaptación de las ciudades, redes energéticas y utilización de los vehículos.
Hemos empezado en este camino poniendo a disposición de la sociedad los vehículos con combustibles convencionales con menos emisiones del mercado, nuestra gama Ecomotive.
Prueba de ello es que somos la empresa con mayor número de matriculaciones de vehículos por debajo de los 120 gramos de CO2 por km.
Para los siguientes pasos, SEAT, con su Centro Técnico al frente, ha de actuar como impulsora de la vertebración tecnológica, no sólo de España sino del sur de Europa y del arco mediterráneo, a través de la electromovilidad. Ya lo estamos haciendo.
F.F.S./A.B.: SEAT es una marca con gran arraigo emocional entre los españoles. En la década de los 50, el 600 se convirtió en un símbolo de libertad y contribuyó a motorizar masivamente a todo un país. La pasión que movió aquella época parece ser la clave en la comunicación actual, pero aparecen productos más clásicos como el Exeo. En un momento donde muchas marcas aprovechan modelos clásicos (Mini, Cinquecento, 205…). ¿Qué valores de aquella época diría que siguen vigentes, ya como filial española del grupo alemán? ¿Qué nuevos valores quiere representar la SEAT de 2010?
R.P.: Los valores que aún siguen vigentes es el hecho de que hoy, como entonces, ofrecemos automóviles con un carácter único. Cada SEAT resulta inconfundible por su diseño, es increíblemente deportivo y ofrece tecnología innovadora a una relación calidad-precio sobresaliente.
La SEAT de 2010 tiene el perfil de cliente más joven del Grupo Volkswagen. Esto se refleja en nuestros productos. Por ello, queremos acentuar las señas de identidad de la marca: carácter deportivo, orientada al diseño y joven. Hoy, joven es también sinónimo de ECO. Eco, de ecológico y de económico. Los productos de la gama SEAT destilan deportividad por los cuatro costados, ofrecen a sus clientes una conducción divertida y unas líneas atléticas pero, a su vez, un comportamiento eficiente. Y ello sin renunciar a una conducción deportiva, joven: menos emisiones, más emociones, éste es nuestro lema.
F.F.S./A.B.: Definen a la fábrica de Martorell como “el verdadero corazón de la empresa”. A través de ella SEAT ha establecido un vínculo especial con Barcelona (y con Cataluña en general, pues es la mayor industria de la Comunidad). ¿Cómo es la relación con la ciudad y las autoridades locales y autonómicas? ¿Representan las tendencias políticas actuales un motivo de preocupación?
R.P.: Para SEAT es fundamental tener una estrecha relación con las administraciones, especialmente con las locales, de los municipios donde SEAT está asentada, pero también con Barcelona, Madrid y el resto de España. Es esencial ser conocedor y estar involucrado en las problemáticas sociales, entender la situación del entorno para poder realizar nuestra actividad de manera competitiva.
Para que nuestra empresa crezca a nivel global, es primordial empezar a crecer a nivel local y esto puede trasladarse a las relaciones institucionales. En relación a las tendencias políticas actuales, cabe mencionar nuestra preocupación por la mala percepción que en la actualidad muchas personas tienen del deterioro de la política. Es importante que esta tendencia se invierta, ya que para la economía es muy importante tener una política adecuada, fuerte, respetada y valorada por todos.
Por otro lado, cabe mencionar que SEAT viene apoyando y apoyará al equipo de Gobierno de cada periodo y que nuestra relación está vinculada con la institución, con independencia del color político que impere en cada momento.
F.F.S./A.B.: En una entrevista realizada a finales de 2007 a Carlos Espinosa de los Monteros, como presidente de Mercedes Benz España, llamaba la atención sobre dos desafíos inminentes en la industria del motor: la ecología (cómo afrontar el cambio climático desde el sector) y el reequilibrio de fuerzas entre los países tradicionalmente productores (Europa Occidental y Japón) y las potencias asiáticas como nuevos fabricantes. ¿Cuál es su opinión al respecto? ¿En qué medida se están percibiendo los efectos de ambos desafíos y cómo se posiciona SEAT ante ellos?
R.P.: SEAT es una empresa que está comprometida con el medio ambiente y actúa de forma consecuente y global en el conjunto de actividades de nuestra cadena de valor. Esto significa que no solamente ideamos soluciones que minimicen el impacto medioambiental en el proceso de desarrollo del producto, sino también en el proceso de fabricación y distribución. Una muestra es el proyecto “SEAT al sol” que permitirá la generación de energía limpia en nuestra fábrica de Martorell –el equivalente al consumo de energía eléctrica realizado por 3.000 viviendas al año– a través de la instalación de paneles solares. Con ello, se dejará de emitir más de 6.200 toneladas de CO2 a la atmósfera.
En relación a nuestros productos, disponemos de la gama Ecomotive. Somos líderes en el mercado español con los coches menos contaminantes (aquellos que emiten menos de 120 g/Km de CO2). Asimismo, venimos realizando una intensa labor en lo referente a electromovilidad –gracias a que disponemos del único centro de desarrollo del automóvil en España–, tanto en los híbridos enchufables (León Twin Drive), como en los vehículos puramente eléctricos, como el IBE Concept, presentado en el Salón del Automóvil de Ginebra. Adicionalmente, tenemos una participación activa en programas estatales y regionales en materia medioambiental (VERDE, LIVE, MOVELE, etc.).
Respecto al fenómeno asiático, el factor clave de éxito de los productores orientales y en consecuencia su ventaja competitiva en relación a los productores europeos es, sin duda, sus bajos costes de mano de obra.
SEAT apuesta por la innovación, la calidad y la tecnología. Es decir, productos que aportan al cliente un claro valor añadido y que van más allá del coche como simple medio de transporte.
Es por ello, que en SEAT creemos firmemente en la formación continuada de nuestros empleados. El sector del automóvil es por definición altamente competitivo, y sin una plantilla motivada y formada es imposible hacer frente a estos nuevos retos.
Entrevista publicada por Executive Excellence nº73 sept.10