La fiscalidad del sector eléctrico, clave para descarbonizar la economía
Descarbonizar la economía o, al menos, reducir al mínimo las emisiones de dióxido de carbono (CO2). Este es el objetivo que se ha marcado la Unión Europea para el año 2050. Se trata de un ambicioso propósito que lleva asociado un complicado proceso de ejecución, ya que supone sustituir el uso de los combustibles fósiles (petróleo, gas y carbón) por energías renovables.
A lo largo de este año, los países miembros deben presentar a Bruselas su plan de descarbonización, que ha de plasmar cómo se hará esa transición bajo las condiciones marcadas por la Comisión Europea: reducir un 40% los gases de CO2, que el 27% del consumo de energía final proceda de fuentes limpias y elevar la eficiencia energética al 30% antes de 2030.
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